miércoles, 17 de junio de 2009

Imagen al mediodía

Los negros y amarillos
cuadrados se extienden
tan lejos que los ojos
no pueden contarlos.

Los blancos una vez inmaculados
se alzan hacia el cielo,
buscando en el infinito
una forma de ser idolatrados.

Y tan lejos ya se han ido
que de los cimientos se han desprendido
que, por el olvido, corroídos
se desmoronan corrompidos.

Todo el murmullo ignora
lo que a la vista se asoma.

Tomándolo como normal
y siguiendo con su andar.

Pero la estructura inmune al tiempo,
con su dorado encaje de grandes momentos,
no se inmuta ante los amargos tragos,
pues a todos ya los ha superado.

Lucía Boneto

1 comentario:

Taabi dijo...

me encanto.

Tábatha